Es un espectáculo concebido para la libertad artística en su máxima expresión dentro del lenguaje del
Flamenco, en el que los intérpretes se unen para disfrutar del arte sin contemplaciones y donde el cante
el baile y el toque se ponen al servicio de la narrativa.
José Valencia al cante, Juan Requena a la guitarra y Jesús Carmona en el baile se adentran en un mundo
onírico en el que diferentes juegos son el motor de cada escena, dándole así un aire fresco a cada uno
de los palos interpretados. Desde los pregones a las alegrías, transitando entre la tradición y la vanguardia.
Una excitante mixtura de tradición y modernidad.